En este año Jubilar nuestra diócesis se hace parte de este momento de misericordia, para concretar esta experiencia querida por el Santo Padre y haciendo realidad sus palabras en la carta dirigida a Monseñor Rino Fisichella Presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización.
“Mi pensamiento se dirige, en primer lugar, a todos los fieles que en cada diócesis, o como peregrinos en Roma, vivirán la gracia del Jubileo. Deseo que la indulgencia jubilar llegue a cada uno como genuina experiencia de la misericordia de Dios, la cual va al encuentro de todos con el rostro del Padre que acoge y perdona, olvidando completamente el pecado cometido.
Para vivir y obtener la indulgencia los fieles están llamados a realizar una breve peregrinación hacia la Puerta Santa, abierta en cada catedral o en las iglesias establecidas por el obispo diocesano y en las cuatro basílicas papales en Roma, como signo del deseo profundo de auténtica conversión.
Igualmente dispongo que se pueda ganar la indulgencia en los santuarios donde se abra la Puerta de la Misericordia y en las iglesias que tradicionalmente se identifican como Jubilares. Es importante que este momento esté unido, ante todo, al Sacramento de la Reconciliación y a la celebración de la santa Eucaristía con un reflexión sobre la misericordia. Será necesario acompañar estas celebraciones con la profesión de fe y con la oración por mí y por las intenciones que llevo en el corazón para el bien de la Iglesia y de todo el mundo.
En nuestra diócesis hemos vivido este momento ,con nuestros hermanos enfermos, teniendo la Eucaristía transmitida por la radio diocesana Regina Coeli y presidida por Monseñor Felipe Bacarreza, después nuestro Obispo y los ministros extraordinario de la comunión llevaron el Santo Viático a los enfermos e impetraron la Indulgencia Plenaria.