En manos de María: nuevos corazones se suman a la Adopción Espiritual

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Hace algunos días, la comunidad diocesana vivió un momento de profunda fe con la ceremonia de cierre del segundo proceso de Adopción Espiritual. El encuentro, organizado por el equipo de Pastoral Social Cáritas, reunió a fieles que durante nueve meses se mantuvieron en oración diaria por la vida de un niño en peligro de ser abortado, acompañando también espiritualmente a sus padres.

La ceremonia fue ocasión para dar gracias a Dios por el compromiso cumplido y, al mismo tiempo, para abrir el corazón a una nueva etapa: el tercer proceso de Adopción Espiritual, que comenzó oficialmente el viernes 16 de mayo y se extenderá hasta el 2 de febrero del 2026, día en que celebramos con alegría la fiesta de la Virgen de la Candelaria, luz para nuestras vidas.

Pero, ¿qué es exactamente la Adopción Espiritual? Es una oración diaria que se realiza en silencio, desde el corazón, por un niño concebido que corre el riesgo de ser abortado. Aunque no conocemos su nombre ni su rostro, Dios sí lo sabe. Esta oración consiste en rezar cada día un misterio del Rosario y una oración especial durante nueve meses, como si se acompañara el proceso de gestación espiritual del pequeño.

A este compromiso se pueden añadir propósitos personales como asistir con mayor frecuencia a los sacramentos, realizar obras de caridad, ayunar o dedicar más tiempo a la lectura de la Palabra de Dios. Todo ello como una ofrenda de amor por esa vida inocente que se encomienda al Señor.

La Adopción Espiritual es una respuesta concreta y esperanzadora que surgió tras las apariciones de la Virgen en Fátima, y que desde 1987 ha sido difundida en distintos países, invitando a las personas a unirse en defensa de la vida desde la oración perseverante. Sus frutos son innumerables: fortalece la fe, sana heridas espirituales, enseña a amar con generosidad y devuelve la paz a muchos corazones.

Cualquier persona puede asumir este compromiso: hombres, mujeres, jóvenes, adultos mayores, incluso personas enfermas o en situaciones difíciles. Solo se requiere la disposición del corazón y la fe en que Dios, que escucha nuestras súplicas, obrará según su voluntad y misericordia.

Desde la Diócesis Santa María de Los Ángeles se invita a quienes deseen unirse a esta hermosa iniciativa a contactar al equipo de Pastoral Social Cáritas, escribiendo al correo psociallosangeles@gmail.com o acercándose directamente a la oficina ubicada en San Martín 327, Los Ángeles.

Porque toda vida es sagrada desde el vientre, y porque cada oración hecha con amor puede salvar un alma, seguimos caminando con esperanza, bajo la protección de María, Madre de la Vida.

 

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